El crismón de este epÃgrafe es considerado raro porque la combinación de la P y la X griega, en este caso desprovistas de trazo horizontal, forman una estrella de ocho rayos, sÃmbolo de la eterna felicidad que llega con la resurrección según San Isidoro y que, además, alude al nombre del difunto.
También según san Isidoro ese motivo iconográfico representa la unión de la Iglesia en Cristo. Existe un motivo similar en Mérida.
La última palabra SEXS, leÃda sexsis, que significa sexta, se repite sin abreviatura en una lápida de Mérida fechada en el 518 y en una de Alcalá del RÃo, datada en el 544. (Fita 1914: 470-472)
Fita lee la fecha 1 de diciembre de la era 676 (año 638) (Fita 1914: 470-472)
Es uno de los siete epÃgrafes escritos con palabras y expresado en cardinales, en lugar de ordinales. (Navascués 1951: 37)
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