Las letras con capitales rústicas, angulosas, de tendencia alargada, trazadas con un surco fino. La letra L presenta el trazo horizontal muy corto y oblicuo a la caja; la S es muy estilizada, de apariencia cursiva; la letra A carece de travesaño; el lóbulo de la P es extremadamente alto y reducido, al igual que el de la R. No existen sexos, pero algunas letras se tocan, en concreto las dos X de la edad y RA en el término (a)era. En general, se aprecian semejanzas paleográficas con la estela de Bores (ERCan 14).
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