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La inscripción se encuentra en muy mal estado de conservación, mutilada en la parte derecha (lo que afecta a parte del texto). Además, la superficie se encuentra muy desgastada, con algunos caracteres casi apagados. A pesar del estado de conservación, la lápida fue concebida con cuidado y evidente calidad: sus caracteres delgados y elegantes, son caracterÃsticos del taller de Coimbra. Muestra regularidad en el módulo de sus letras, con una paginación cuiadada y equilibrada (EMP 277).
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