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La placa presenta estrecho filete sin decoración, que hace las veces de marco y separa el campo epigráfico con una sola raya incisa. Las dos primeras líneas están en latín, las siete siguientes en letras árabes cursivas con puntos, y al final otras dos líneas con escritura latina. Las dos últimas líneas están en sentido inverso y son de difícil lectura. La disposición del texto indica que el artesano reutilizó una estela grabada en latín y que luego calculó mal la distribución del texto en árabe. No se indica la clase de interpunciones que contiene. La cuarta línea conserva los ápices de las letras, ahora perdidas por una fractura del quinto renglón; así se puede restituir parte de la fecha (Barceló, 2019, 126).
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