Esta inscripción es importante por ser la primera de la provincia de Cáceres de este tipo, es decir, de consagración de una basÃlica a Santa MarÃa. Además se puede identificar al obispo: Oroncio, sucesor de Esteban en la diócesis de Mérida.
Gracias a las noticias sobre los Concilios de Toledo y a esta inscripción, se puede suponer que la sucesión entre los dos obispos posiblemente tuvo lugar en el año 635 (CILCc 593).
|