Este es el primer claustro en el qual fue primeramente fundada la Orden del bienaventurado San Geronimo en España, por el muy santo Padre Gregorio XI, de santa memoria, en el año del Sennor mil y treziencos, y setenta y tres annos, a suplicacion de los venerables padres fray Pedro Fernández Pecha, e Fray Fernando Yánnez de Cáceres, primeros Fra<i>les de la dicha Orden, recibiendo el nuestro hábito de la mano del Santo Padre. El qual dicho claustro fue eregido en monasterio por el reverendo Padre don Gómez Manrique Arçobispo de Toledo en el sobredicho año.

Lectura dada por CIHM 4, 44.

Este es el primer claustro en el que se estableció la Orden del bienaventurado San Jerónimo, fundada en España por el muy santo Padre Gregorio XI, de santa memoria, en 1373 a petición de los venerables padres fray Pedro Fernández Pecha y fray Fernando Yáñez de Cáceres, primeros frailes de dicha Orden que recibieron nuestro hábito de la mano del Santo Padre. D icho claustro fue erigido en monasterio por el reverendo don Gómez Manrique, arzobispo de Toledo en dicho año.

Traducción dada por CIHM 4, 44.

Fray Pedro Fernández Pecha, junto con fray Pedro Román, fue quien consiguió ante el Papa, en Avignon, el establecimiento de la Orden de San Jerónimo en España. Ambos frailes regresaron del viaje a Aviñón entre el 16 de abril y el 9 de septiembre de 1374; fray Fernando Yáñez de Figueroa, noble cacereño que había sido canónigo de Toledo, sucedió a fray Pedro Fernández Pecha en el priorato del monasterio ese mismo año, después del retorno del segundo. Ambos fueron artífices de la construcción del monasterio, financiándola y promoviéndola. El claustro inicial fue llamado "de los santos, porque con las manos y el trabajo de aquellos siervos de Dios fue edificado", según palabras de F. José de Sigüenza (Sigüenza, 1907: 43). Era un claustro pequeño y pobre de "setenta pies de largo, de ancho onze" (Sigüenza, 1907: 42). A la dotación de este monasterio contribuyeron tanto doña Elvira Martínez, madre del fundador, como sus hermanas, María y Mayor Fernández de Pecha, así como el hijo de esta última, Men Rodríguez Valdés; también Alonso de Pecha, obispo de Jaén dimisionario, hermano menor de fray Pedro y residente en Roma, que el 13 de abril de 1378 hizo donación al monasterio de San Bartolomé de Lupiana de sus tierras en Madrid, Barajas, Quintana y otras, para apoyar su mantenimiento (CIHM 4, 44).