Una vez más el epÃgrafe corresponde a la sepultura de un eclesiástico, en este caso un sacerdos, en cuya laudatio se matiza que ha servido a Dios en este templo durante un periodo breve ( Deo serviens annis hac in aula modicis), esta información nos permite suponer que en el lugar del hallazgo, si corresponde al original, debió existir una iglesia. Termina la laudatio con la indicación de que su muerte se ha producido de forma inesperada. A continuación de la laudatio se conservan restos de una commendatio animae , en la que se suplica al lector que encomiende su alma al Señor en sus oraciones.
El epÃgrafe muestra un vocabulario rico y novedoso, asà por ejemplo, tectus humo arida (?), (l. 1) para indicar la sepultura; sacerdoti functus honore (l. 2), giro de fuerte sabor clásico, con el que se describe su actividad sacerdotal, de forma análoga a como se harÃa con un magistrado romano; Deo serviens (variante notable del normal famulus Dei) annis hac in aula modicis (ll. 3-4), recurso curioso para indicar que ha muerto joven, idea que se repetirá en la lÃnea siguiente mediante el giro migravit e saeculo subito. (González Fernández, 2016, p.103-104)
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