Hic locus antiquitus Michaelis Archangeli honore dicatus, brevi opere instructus, post ruinis obolitus diu mansit dirutus; donec Adefonsus abba cum sociis adveniens a cordubensi patria edis ruinam erexit sub valente sereno Adelfonso principe. Monachorum numero crescente, demum hoc templum decorum miro opere a fundamine exundique amplificatum erigitur; non iussu imperiali vel oppresione vulgi, sed abbatis Adefonsi, et fratrum instante vigilantia duodenis mensibus peracta sunt haec opera, Garsea sceptra regni per agens Mumadonna cum regina. Era DCCCCLI. Sacratumque templum ab episcopum Iennadium XII kalendas decembrium

Lectura dada por Martín López (2014, 218-219).

Este local, de antiguo dedicado en honor del arcángel Miguel y erigido en pequeño edificio, tras de caer en ruinas, permaneció largo tiempo derrotado, hasta que el abad Alfonso, viniendo con sus compañeros de Córdoba su patria, levantó la arruinada casa en tiempo del poderoso y serenísimo príncipe Alfonso. Creciendo en número de monjes, erigióse de nuevo este hermoso templo con admirable obra, ampliado por todas partes desde sus cimientos. Fueron concluidas estas obras en doce meses, no por imposición autoritaria ni oprimiendo al pueblo, sino por la vigilancia insistente del abad Alfonso y de los frades, cuando ya empuñaba el cetro del reino García con la reina Mumadona, en la era 951, y fue consagrado este templo por el obispo Jenadio a doce de las calendas de diciembre.

Traducción dada por Gómez Moreno (1919, 141-142.

"Muchos de estos asentamientos de repoblación solían tomar como base antiguos núcleos, en los que se conservan restos de pasadas eificaciones. Dichas zonas solían ser cedidas por el monarca a nobles monasterios, que se encargarían de recuperar productiva y demográficamente este territorio. En este sentido, las consecrationes de muchas iglesias y monasterios de la zona son un reflejo fiel de este particular proceso, publicitando no sólo la destrucción del núcleo poblacional, sino también a sus protagonistas, en definitiva a esos grupos repobladores.
La desaparecida lápida de consagración del monasterio de San Mig.uel de Escalada es un perfecto ejemplo" Rodríguez Suárez (2009, p. 150)