La inscripción se halla en tres de las cuatro caras del objeto. La dirección de la escritura, dextrógira, comienza siempre por la "punta de los dedos". En dos casos la inscripción llega hasta la mitad y en uno pasa la longitud del vástago, siguiendo la lectura en ángulo recto. El orden de las palabras está marcado por las interpunciones, que indicarÃan la separación de palabras y la continuación en la lÃnea siguiente. Jordán explica que la primera secuencia e interpunción se halla en uno de los vástagos; la segunda y la interpunción en otro; y la tercera en el último "dedo". Por lo que indica que la lectura habrÃa que verla en tres lÃneas diferentes, a diferencia de la lectura seguida de las tres secuencias que realizan los editores.
Además, hay que señalar el detalle que aparece en la pata izquierda de la cara 1, es decir, una supuesta marca compuesta por varios cÃrculos concéntricos. La misma marca o similar también se encuentra en tres téseras de Sasamón. Para los autores se trata de una contraseña del artesano, hecha con un golpe de martillo por medio de un troquel, con lo que estarÃa relacionada con las de Sasamón. Otros autores (Torija y Baquedano) lo explican como simbolismos astrales o mágicos. También en varias monedas de plata y bronce con signario de cecas como bilbiliz o konterbia karbika, entre otras, hay una contramarca realizada con un punzón circular o cónico que recuerda a estas marcas.
La palabra de la cara A, lakai, se interpreta, según los editores, como un dat. sg. de un tema en -a, que se traducirÃa como "a Langa", "para Langa" o como loc. sg., "en Langa", con omisión de nasal ante oclusiva. Se compara con lakikum (Torrijo del Campo).
En la cara B el cuarto signo, con un mástil punteado en su parte inferior, ofrece dudas, y podrÃa pensarse que es una z, una u o un signo ke tumbado.
La palabra que se lee laiuikaino quizá sea un gen. sg. de tema en -o, para los editores, y para de Hoz, quien opina que se trata de un NP, es decir, la indicación de una las partes pactantes. Para laiuikaino se apunta como paralelo el cognomen latino Laevus, "zurdo, del lado izquierdo, tonto, desgraciado", y en sus derivados Laevius, Laevia, Laevinus y Laevillus, y los NNP "ilÃricos" Laevicus, Laevonicus, Levonicus y Levo que provienen de la raÃz indoeuropea *laiwo- "débil, torcido, deformado".
La segunda parte, -kaino, tiene como paralelos Caenecaeni (gen.) (CIL II 5763, Paredes de Nava, Palencia) y turikainos [Z.09.03, IV-2] (Botorrita, Zaragoza) y el NP ERIACAINVS de Arronches (Portalegre, Portugal). También parece posible aislar el sufijo -ino- que se documenta en kaukirino [Z.09.01, IV-40] y quizás también en eskutino [Z.09.03, II-14] y TICINO [TE.17.11], mientras que en la formación de adjetivos toponÃmicos sólo se atestigua en kateraikina [SP.02.21SUSPECTA] y routaikina [SP.02.17FALSA].
En la cara 3 todos los signos están claros, aunque el primero, ba, se aprecia algo menos. Quizás balatioku intente reflejar por escrito palantiocu, que serÃa un gen. pl. de tema en -o, sin la notación de la -m. Como paralelos tenemos el grupo familiar balaisokum, los NNP balakos y Balaesus, y la ciudad vaccea de Palantia. Otra posibilidad es que refleje un grupo de muta cum liquida con lo que una forma blatioku podrÃa relacionarse con antropónimos del tipo Blandus/Blanda. Pero también existe la posibilidad de que la palabra sea un Nom. sg. de un tema en nasal. La no expresión de la m final se da en otros casos como kolounioku [Mon.67] / Clounioq y ekualaku [Mon.63], ambos genitivos plurales de los localicios.
Para de Hoz la interpretación de la cara C está condicionada por la interpretación de A. Si A fuera una de las partes pactantes, balatioku podrÃa ser un gen. pl. incompleto que determinarÃa a lauikaino, o un NP en nom. que indicase el magistrado que habÃa actuado. Sin embargo, si A fuera un locativo, C podrÃa indicar la segunda parte pactante, referido a los ciudadanos de Pallantia, en gen. incompleto, o en nom. como NP.
La traducción de la pieza podrÃa ser: "En Langa, de Laiuikaino de los balatiokos".
Los autores piensan que en la otra mitad de la pieza también habrÃa inscripción, que completarÃa la de esta pieza.
Los paralelos que se aducen para esta fórmula, a excepción del locativo del principio, es la de la pieza de bronce procedente posiblemente de Patones (Madrid): sekilako amikum melmunos/ata/arekorati/ka kar/bistiros lastiko./ueizos.
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